En nuestros artículos anteriores “Qué pagamos en el recibo de la luz” y “El precio del Pool: cómo funciona y qué variables incluyen”, explicábamos en qué conceptos se divide el recibo de la luz, qué conceptos se pagan y cuánto pesan, y qué es el precio del Pool, como se forma y qué variables influyen.
En este artículo nos vamos a centrar en cómo ha sido la evolución histórica del precio del Pool, qué perspectivas de futuro hay y cómo influirá en el gasto energético de las empresas.
Evolución histórica
El precio del Pool, desde su inicio en 1998, ha llevado una clara tendencia alcista a largo plazo con un crecimiento medio annual de alrededor del 2%. Todo ello a pesar de haber vivido desde entonces varias crisis económicas, haber introducido en el mix energético decenas de GW de proyectos de generación removable (eólicos, fotovoltaicos, termosolares, etc.), entre otros, todos ellos factores que impactan directamente en su precio.
Fuente: Elaboración propia a partir de datos de ESIOS REE
Eso sí, su evolución no ha sido ni mucho menos una línea recta. Más bien se parece a unos dientes de sierra o a una montaña rusa. Ha habido variaciones interanuales al alza de hasta un 92% (entre 2004 y 2005) y a la baja de hasta un -43% (entre 2008 y 2009, coincidiendo con la última gran crisis económica). Pero eso no es todo, además de las variaciones interanuales, vemos que las intra-anuales aún más importantes en los precios medios diarios (PMD). Por ejemplo, en 2013 la horquilla de PMDs estuvo entre 0 y 99 €/MWh.
Perspectivas de futuro
Esto de sacar una bola de cristal y adivinar el futuro no es algo ni mucho menos fácil, sobre todo cuanto más a largo plazo pretendamos llegar. No obstante, sí es posible intuir tendencias a 5, 10 o más años. Eso sí, con una horquilla de margen de error que se amplia a medida que el plazo de alarga.
En el siguiente gráfico podéis ver unas curvas de previsión de precios del Pool a largo plazo que hemos elaborado en base a análisis de diferentes expertos. La curva azul refleja los datos de los estudios realizados en abril de 2019 y la roja de los mismos actualizados a abril de 2020. Las curva de trazos y puntos reflejan la posible volatilidad y son unas bandas inferiores y superiores en las que se moverán previsiblemente los precios medios anuales.
Fuente: Elaboración propia a partir de datos de varias fuentes
Cabe destacar que la curva roja se refiere a los estudio y análisis realizados en plena crisis del COVID19, en abril de este año 2020, cuando los precios del Pool y la demanda cayeron de forma brusca y la incertidumbre a CP y MP era muy elevada. No obstante, desde entonces los precios se han recuperado (sobre todo los de los futuros), lo que indica que esos mismos estudios realizados a día de hoy podrían dar lugar a resultados con precios ligeramente superiores.
En definitiva, la tendencia a LP es de estabilización del precio en el entorno de los 50-40 €/MWh con una ligera tendencia al alza. Es lo que los expertos llaman el “punto de equilibrio”. Ahora bien, con la entrada masiva de renovables hasta el año 2030 y más allá, y la reducción del “hueco término”, se prevé que la volatilidad aumente considerablemente. Parece que subidas y bajadas interanuales del precio medio del Pool del entorno del +50% y -50% podrían ser relativamente frecuentes.
Cómo influirá en tu gasto energético
Nos vamos a centrar en las tarifas 3.1 y 6.X, es decir, las de los medianos y grandes consumidores de energía eléctrica.
En estas tarifas, el peso del precio del Pool sobre el total del Término de Energía, se sitúa en el entorno del 50-80% y, el peso del Término de Energía sobre el total de la factura de la luz, en el entorno del 70-90%. Por lo tanto, el precio del Pool tiene un peso del 35-72%, por lo que variaciones interanuales del precio medio del Pool de +50% y -50%, suponen subidas en la factura de la luz de entre un 18% y un 35%.
Pongamos un ejemplo práctico real con números para ver el posible efecto en la factura de la luz y en su cuenta de resultados:
- Consumidor con tarifa de acceso 6.1 y con un peso del precio del Pool en su factura de la luz del 50%, en el que la factura de la luz representa un 33% de los gastos de explotación totales y su margen EBITDA es de un 10%.
- Una subida de un año en el precio del Pool del 50%, significa que entraría en pérdidas, con margen EBITDA negativo, por debajo del -5%.
Como conclusión, podemos afirmar que el precio del Pool continuará con una ligera tendencia alcista en los próximos 10-20 años y que la volatilidad aumentará con la entrada de renovables y la disminución del hueco término. Por ello, y dado el impacto que estas variaciones pueden tener en la cuenta de resultados de una empresa, cada vez más consumidores establecen estrategias de fijación de precios de compra de la electricidad a MP y LP, como puedan ser los PPAs (Power Purchase Agreements).